Entre
jardines pasé los días buscando semillas.
Solo encontré
el centro de tus latidos.
Eras
castaña y venias del sur.
Yo solo
palabras entre ignorancia de luz.
Supe de
surcos húmedos por tu risa clara
En un
tiempo en que cerraron las ventanas
Y cambié mi
techo para recibir tus lluvias
Para
abrazar de carbón el invierno.
Esta humedad
de helechos canta floraciones.
Vienes y te
vas como brisa a los rayos de sol.
En el
invernadero fabrique una primavera.
Tú eres el
centro de todo florecer.
Cuando creí
que no estabas, te descubrí germinando.
Madura raíz
del humus explotas en mi vida todos los días.
Buscando
semillas siento tu voz dulce, te enojas y encantas.
Soy
solamente el silencio de tu austral florecimiento.
Hola Tito Cariz,
ResponderEliminarlo descubrí buscando algo. Y resultó ser lo que los gringos llaman "serendipity". Un encuentro afortunado. Me ha gustado mucho su poesía. Supongo y espero que la haya publicado más allá de exponerla en un blog.
Cordiales saludos